Muchas veces tenemos recetas de toda la vida que dándoles un pequeño giro, cambiando o incorporando algunos ingredientes, nos saca de la monotonía y levanta ese plato a otro nivel. Aquí os mostramos un ejemplo; esta receta está basada en la ensalada caprese italiana, utilizando ingredientes un poco más lujosos pero al fin y al cabo son los mismos: tomate, queso, albahaca, aceite y vinagre.

¿Cuál es la diferencia? pues algo tan sencillo como asar los tomates en vez de ponerlos crudos, utilizar cherry en vez del tomate normal, cambiar la mozzarella por burrata (es queso de la misma familia pero en el centro está más cremoso y le da suntuosidad a la receta), incorporar los piñones, el ajo y también un punto de limón; el resultado es espectacular, de verdad. Trabajo el mínimo y resultado insuperable.

Para estas recetas con ingredientes básicos os recomendamos siempre utilizar los de la mejor calidad que encontréis, merece la pena y aportan un sabor maravilloso.